Un año más, la ciudad madrileña de Pinto volvió a acoger el campeonato de España de Judo sub-21. Por el pabellón Príncipes de Asturias pasaron más de 200 deportistas que están llamados a ser el futuro de nuestro judo.




En total fueron 16 los judokas que, entre pronósticos y sorpresas, se alzaron con el título de campeones de España, 8 en categoría femenina y 8 en masculina.
Destacar la victoria de la catalana Mireia Lapuerta en la categoría de -48Kg, que se imponía en la final sobre la madrileña Laura Martínez, que llevaba subiendo a lo más alto del pódium en las ultimas 4 ediciones y llegaba a esta edición del Campeonato de España con la vitola de favorita, tras alzarse el año pasado con los subcampeonatos de Europa y del mundo. En -44Kg la victoria fue para la alicantina Mireia Rodríguez, que superó a la gallega Lucia Rodríguez; en -52Kg, la judoka de la federación Valenciana Nina Esteo, retuvo el título de campeona obtenido el año pasado, al imponerse en la final a la navarra Izaskun Ballesteros, al igual que la catalana Patricia Torres, que volvió a proclamarse campeona de España, tras una disputadísima final ante la canaria Carolina Rivero. En -63Kg la vasca Maialen Ramos se impuso en la final a la valenciana María Ramos. En -70Kg seria la joven catalana Ai Tsunoda, la que llevó el oro, al derrotar por ippon a la asturiana Eva Bueno. También por ippon se impuso la madrileña Sara Fernández a la canaria Leticia Travieso, en la final de -78Kg. La última final femenina del campeonato, la de +78Kg, fue para la catalana Marta Antón, que supero a la aragonesa Patricia Ferrer.
En categoría masculina, la expedición andaluza empezó muy fuerte, llevándose los dos primeros oros de la competición, el de -55Kg, para Francisco García que se impuso al madrileño Gorka Sánchez, y el de -60Kg, para Rosendo Laino, que hizo lo propio ante el también madrileño Diego Fernández. En -66Kg, fue el alicantino Salvador Cases, el que se colgó el oro al superar con un espectacular ippon, al madrileño Adrian Nieto. En la final de -73Kg tuvimos uno de los combates más espectaculares de la jornada; el disputado entre el judoka de la federación gallega Javi Cabello, y el madrileño Carlos Sotillo, que finalmente cayó del lado de Cabello. Las mismas autonomías estuvieron implicadas en la final de -81Kg, pero con distinta suerte, pues en esta ocasión fue el madrileño Adrian Ponce el que se impuso a Javier Gallego. En -90Kg fue el valenciano Ignacio Alcibar el que se colgó el oro al superar al madrileño Dario Nemati por dos waza-aris. Idéntico resultado que el conseguido por el catalán Victor Barrero, para superar el gallego Alejandro Bastero. La competición se cerró con una nueva medalla para Galicia, la de +100Kg donde Martín Salvado se impuso al también gallego Guillermo Cordero.
En el global de la competición, fue la Federación Catalana, con 5 campeones, y la Valenciana con 4, los que se llevaron el grueso de medalla de oro, seguidos por Madrid, Galicia y Andalucía con 2 y el País Vasco con 1.


 
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